Es verdad, cada pueblo de Latinoamérica tiene derecho a que se le consulte sobre un paso tan importante como es la integración de su país en el ALCA. Una consulta popular en las urnas, para que los pueblos decidan. El Presidente del Consejo de Estado de Cuba Fidel Castro está reclamando un Plebiscito a los gobiernos de Norte América. Nosotros estamos reclamando un plebiscito a su gobierno, no sobre la entrada de Cuba en el ALCA, no es ese nuestro interés, sino sobre los cambios políticos y económicos que son una necesidad vital para el pueblo de Cuba. Que nuestros hermanos latinoamericanos decidan sobre su entrada en el ALCA y nosotros los cubanos, sobre nuestras leyes y nuestro destino.
El PROYECTO VARELA, que se inspira en lo que nos enseño el propio Padre Félix Varela, devuelve la soberanía a los cubanos. Hoy esa soberanía esta usurpada, por que los diputados cubanos, no son electos por los ciudadanos, son designados. La propia Ley Electoral, establece un candidato único por cada asiento de diputado y las candidaturas solo son presentadas por Comisiones de Candidaturas compuestas por representantes de organizaciones que están dirigidas por el Partido Comunista. Los ciudadanos ni eligen, ni postulan a los diputados y ni siquiera pueden confirmarlos, pues la boleta electoral no trae espacio para decir no. Si un candidato no quiere confirmarlos, pues la boleta electoral no trae espacio para decir no. Si un ciudadano no quiere a ninguno de esos candidatos únicos, su voto no vale y no se cuenta.
El Proyecto Varela, ofrece una nueva Ley Electoral, pone la decisión en manos del pueblo, proponiendo nuevas leyes que garantizan las libertades fundamentales y que terminan la discriminación y la explotación de los trabajadores cubanos.
Somos nosotros los que no queremos el neoliberalismo, en ninguna modalidad, tampoco, si este viene envuelto en el totalitarismo y bajo la consigna de Socialismo o Muerte. Cuba es un país de ricos y pobres, de explotadores y explotados donde la explotación puede ser de dirigentes, gerentes, capitalistas extranjeros, o toda una nueva clase, sobre, sobre los trabajadores cuyo salario no vale y que no tienen un autentico sindicato que les defienda. Por eso el Proyecto Varela pide la Libertad Sindical. No queremos la dolarización de ninguna forma, tampoco, si esta es tan parcial como la aplicada en Cuba, donde muchos de los productos necesarios para comer, vestirse y vivir, se cobran en dólares, mientras le pagan al trabajador en pesos cubanos y en desproporción abusiva, como abusivos son los precios que impone el mercado socialista dolarizado. Las diferencias entre los nuevos privilegiados y ricos del poder y la inmensa mayoría pobre, marginadas y sin perspectivas de solución es preguntarle a los cubanos si quieren estos cambios, así mismos, en un PLEBISCITO.
Esa es la petición que hacemos, apoyados en la propia Constitución de Cuba, ese es el PROYECTO VARELA.
Que se le dé la palabra a los cubanos, en las urnas, en un PLEBISCITO y verán como hasta esa parte del pueblo que hoy desfila con uniforme y grita en la plaza, votará por nuevas leyes que le aseguren sus derechos, votará por la reconciliación, votará por la verdad, votará por la verdadera autodeterminación, votará por la libertad.
Ese es nuestro desafío: que el gobierno cubano reconozca que es un derecho constitucional hacer esa petición de Plebiscito, que se comprometa a respetarlo y más aún, que cumpla con su obligación política, patriótica y moral de devolver el ejercicio de los derechos soberanos de los cubanos realizando este Plebiscito.
PROYECTO VARELA
Y ASI HABLA CUBA ENTERA
Oswaldo José Payá Sardiñas
A Nombre de los Gestores del Proyecto Varela