He estado pensado sobre el absurdo crimen en Noruega y llego a una conclusión, la misma una vez mas, respecto a los fanatismos: son el peor cáncer de la humanidad pues generan obtusos capaces de crímenes horrendos. Un fanático es peligroso en si. Un fanático capaz de convencer y fanatizar a un grupo de personas y a un pueblo es letal. La historia nos habla constantemente de estos “iluminados” a los que “dios les habla al oído” según afirman ellos mismos. Estos mesías vengadores del dios bíblico de los ejércitos o de la materia mas bruta, por si solos solo son unos infelices enfermos que no complican la vida a nadie, pero cuando comienzan a tener astutos palas que creen controlar la situación a su favor, aunque tarde o temprano también a ellos les explotan esos globos en el rostro, o cuando comienzan los ingenuos, los mal informados y los tontos incorregibles a ser receptivos al mensaje del absurdo….. Lenin, Mussolini, Hitler, Mao, Kim Il Sun, Fidel Castro, Ernesto Guevara, Ayatola Komeini, Osama bin Laden, o David Koresh, Shoko Asahara y Andres Behring brevik, sea el nombre que tengan, comenzaron como unos oscuros y poco convincentes personajillos de los que todos se burlaban. Luego desataron su frustración congénita sobre la faz de la tierra en nombre de SUS dioses y de SUS pueblos.