Mucho se está hablando de Cuba en los últimos tiempos. Se ha convertido en la nueva tendencia de la moda que grandes personalidades del mundo de la política, la religión, la música, el cine y el deporte visiten la isla. Tanto visitantes como Junta Económico-Militar cubana tratan de presentar estas visitas como imagen de un supuesto cambio y de una supuesta apertura que no están sucediendo ni van a suceder si no se toma como referencia el derecho de los cubanos a la autodeterminación como individuos y como pueblo. La máxima expresión de esta tendencia de interpretar a Cuba será la próxima visita del presidente de los EEUU, Barak Obama.
Hay quienes pretenden incluso emplazar a los cubanos para que nos definamos sobre la supuesta influencia que éstas visitas tendrían sobre la sociedad cubana o sobre la visión de la realidad de Cuba que tratan de promover. Los cubanos, dentro y fuera de Cuba, con todo nuestro derecho por supuesto que tenemos algo que decir al respecto, solo que al parecer lo que tenemos que decir no es escuchado o no gusta a quienes ya han decidido pactar con una tiranía dejando a un lado la solidaridad con los oprimidos.
No es ocioso recordar que desde el publicitado anuncio del deshielo en las relaciones entre Cuba y EEUU, solo ha habido un incremento notable en la represión a los activistas cívicos y defensores de los derechos humanos. En el coso a los cubanos “de a pie”, que han decidido probar suerte creando pequeños negocios privados para ganarse la vida de una manera honesta e independiente la persecución y exigencia de incondicionalidad al régimen es mayor y en cuanto a la libertad de culto cada vez son más frecuentes las noticias sobre la demolición por parte de las fuerzas represivas de varias casas-cultos cristianas.
Nunca hemos estado a favor del aislamiento de Cuba, pero cuando nos referimos a Cuba estamos enmarcando a toda nuestra Nación, a todo nuestro pueblo, sus anhelos de justicia, libertad con el alto precio que ha pagado por buscar lo que nos ha faltado por más de medio siglo: libertad y la felicidad.
Quien se acerque a Cuba debe tener esto en cuenta o estará tomando partido solo por un sector de nuestra sociedad y no seria precisamente el que ha sido oprimido por la dictadura más antigua del hemisferio occidental. Estarían tomando partido con los poderosos que niegan los derechos y la soberanía popular a los cubanos.
El MCL reafirma que no corresponde a los EEUU ni a ningún otro país o conjunto de países cambiar a Cuba. Somos los cubanos, y solo los cubanos, quienes debemos trabajar por alcanzar una Cuba nueva, “con todos y para el bien de todos”. Pero sí corresponde a la comunidad internacional solidarizarse con nuestras demandas de respeto a todos los derechos de todos los cubanos.
La comunidad internacional es la que debe definirse y decidir si va a apoyar la demanda ciudadana de cambios reales y radicales en las leyes para que éstas reconozcan y garanticen el respeto a una verdadera libertad económica, religiosa, de expresión, de asociación, de prensa, así como de elecciones libres, democráticas, plurales y competitivas; si los cubanos podremos entrar y salir libremente de nuestro propio país o si por el contrario, se va a alinear con el cambio-fraude fraguado por la dictadura para darle legitimidad y continuidad a un régimen que trata de reciclarse a sí mismo solo para garantizar los privilegios de la casta oligárquica en el poder.
El MCL reafirma que nuestro compromiso es con el pueblo oprimido de Cuba. Con esos más de 25,000 ciudadanos que ya han demandado legalmente el Referendo mientras el régimen responde con la segregación, la cárcel, el destierro y el asesinato de sus gestores.
Si algunos, o muchos, dentro y fuera de Cuba, deciden apoyar el cambio-fraude, y con ello darle legitimidad a una situación en que los cubanos continúen marginados y sin libertad, seguiremos reclamando, aunque nos quedemos solos y desentonemos, todos los derechos para todos los cubanos.
Si somos invitados a participar del encuentro del Presidente Obama, como siempre hemos hecho con todos aquellos que visitan nuestra patria y han estado interesados en escuchar y solidarizarse con la causa de nuestra libertad., esto diremos en nombre de esas decenas de miles de cubanos que han apoyado iniciativas como el Proyecto Varela, la Ley de Reencuentro Nacional o El Camino del Pueblo. Eso le diremos en nombre de nuestros hermanos segregados, perseguidos, encarcelados, desterrados y asesinados.
Consejo Coordinador del Movimiento Cristiano Liberación
18 de Marzo de 2016
Aniversario XIII de la Primavera de Cuba.