Artículo publicado originalmente en Examiner
En otras instancias, las autoridades estatales han utilizado cualquier pequeño incidente para acusar a los críticos de violar la paz, como es el caso de Yandier García Labrada del Movimiento Cristiano de Liberación, la organización no gubernamental más importante de Cuba, cuyo fundador, Oswaldo Payá, falleció en un “Accidente de automóvil” de 2012, muchos creen que fue organizado por el gobierno para deshacerse de su crítico más prominente.
Labrada fue arrestado el 6 de octubre después de quejarse de la ineficiencia del sistema de distribución de alimentos del gobierno mientras esperaba en la fila para comprar alimentos en la ciudad de Manatí, donde vivía. Según los informes, se encuentra recluido en “El Típico”, la prisión provincial de Las Tunas.
El hombre que sucedió a Paya como líder del Movimiento Cristiano de Liberación, Eduardo Cardet, está en libertad condicional después de cumplir tres años de prisión, pero Cardet está siendo constantemente amenazado con más encarcelamiento. Otra líder, Rosa María Rodríguez, anunció recientemente que su nieto Rosuan Durán Melchor había sido condenado a seis años de prisión por mezclarse con “elementos antisociales”.