El régimen totalitario que hoy malgobierna nuestro país cambiará. Es inevitable que así sea porque la vida social y política es cada día más plural y dinámica para permanecer controlada por una sola organización durante tanto tiempo.
Cada día más cubanas y cubanos se liberan y se involucran en la búsqueda y construcción de una nueva realidad, ampliándose y enriqueciéndose nuestra diversidad, lo cual conforma el sustrato desde el cual se puede construir una democracia real. Es nuestro deber saber captar este momento transcendental de cambio y con madurez, desprendimiento y determinación lograr que la transición sea hacia un estado de derechos y evitar que se imponga el fraude que impulsa el actual régimen.
El cambio es inminente, está en marcha, pero es nuestro deber y responsabilidad llevarlo a puerto seguro.
Eduardo Cardet Coordinador Nacional del MCL