En la misma línea, Antonio Díaz Sánchez, secretario general del Movimiento Cristiano de Liberación (MCL), fundado en la isla por el activista fallecido Oswaldo Payá, aseguró que abrir una misión diplomática estadounidense en La Habana significa “dar un espaldarazo a un Gobierno tiránico que ha negado las libertades y derechos humanos”.
Además, precisó Díaz, la apertura de las sedes diplomáticas a partir del 20 de julio es el pistoletazo de salida para la entrada de inversión y capital extranjero, “en un ambiente de no derechos y donde prima la falta de libertad y el totalitarismo”.