ABC Payá: La mano amiga no es la manipulación del PSOE

The PSOE’s manipulation is not a friendly Spanish hand .By Oswaldo Payá

Nunca hemos intervenido en la política interna española, auque últimamente, el PSOE ha usado sistemáticamente a Cuba a nuestro dolor, la desventaja del pueblo cubano debido a la opresión en que vivimos, para sus fines políticos. Lo hace en primer lugar ofendiendo la inteligencia de los cubanos y los españoles, tapando el sol con un dedo y justificando los que no tiene justificación. Sus manifiestos fines con ese llamado diálogo crítico se han convertido en un medio para hacer política partidista, instrumentalizando, generalmente de manera burda, la situación cubana. Exhibir como trofeo lo que llama logros para su ganancia política no es leal no con el cubano, ni con los españoles, pues el gobierno del PSOE con su aliado IU sabe muy bien que no ha habido ningún compromiso ni manifiesta voluntad de cambios buenos para Cuba. Y los cambios si son verdaderos tienen que conllevar a la liberación de todos los prisioneros políticos, no a desterrar y “regalar” algunos antes de las elecciones españolas. Cambios verdaderos serán cambios en las leyes para que se respeten los derechos de los cubanos. Pero la política del PSOE y IU deja muy claro al gobierno cubano que eso no es un asunto importante, que las relaciones pueden desarrollarse al máximo aun en el continuismo del orden de no derechos, pero que se necesitan “gestos” para poder presentar algo a los españoles antes de que voten. No se quienes deben sentirse mas insultados si los españoles o los cubanos.

El Señor Bernardino León me ha mencionado diciendo “que Oswaldo Payá de la misma familia política del PP apoya la política del diálogo crítico del PSOE”

En primer lugar somos familia de España, pero eso es algo que al parecer el sectarismo con que ha invadido el PSOE no puede entender. Siempre respetaremos al gobierno elegido por los españoles como el gobierno de España, pero en los últimos cuatro años, también de cara al mundo este no ha sido un gobierno que tiende la mano española para Cuba, sino que hace o permite una manipulación de Cuba por el partido socialista y el comunista. Respetamos a muchas personas de buena voluntad de ese partido y a sus electores, pero deben saber como nos sentimos y que se hace a nombre de ellos y peor que se hace a nombre de España. Si esto mismo está ocurriendo dentro de España, si el sectarismo hace que el estado y la sociedad sean capturadas por un partido, es algo que tienen que resolver los ciudadanos de ese estado. Nosotros sufrimos eso a ultranza y sabemos lo que significa.

Otro asunto es que ese llamado “diálogo crítico” ni es diálogo, ni es crítico. Nuestra experiencia es que durante los gobiernos anteriores y especialmente durante el gobierno anterior en España, si hubo la voluntad de un verdadero diálogo crítico con el gobierno cubano y un verdadero diálogo con lo que queríamos dialogar. Sinceramente la relación establecida entre la sociedad civil cubana y el gobierno anterior, era con el gobierno de España y no con “el gobierno del PP”.

Y fue una relación fluida, muy digna, transparente, positiva y respetuosa. Eso del gobierno del PSOE, del gobierno de un partido comenzó con este gobierno que hay ahora en España y nuca antes, después de la transición.

Excluirnos de invitaciones a las celebraciones nacionales, fue el primer paso muy simbólico de la exclusión que vendría después. Al negar los gestos simbólicos de reconocimiento de que en Cuba, no sólo hay gobierno sino sociedad civil, fue coherente este gobierno del PSOE y su aliado IU desde que comenzaron, pues después ha tratado de que esa misma política la tenga toda Europa. Es decir el distanciamiento de la sociedad civil, la justificación del régimen y lo peor: presentar como logros supuestos progresos mientras la opresión y la falta de derechos se mantiene o crece.

De esta manera no han contribuido, sino perjudicado el cambio pacífico en Cuba, pues alientan el inmovilismo.

Es insultante que una política sumamente criticada por la casi totalidad de la representación de la mayoría de la sociedad civil y disidencia en Cuba sea presentada como triunfo de un partido.

Si quieren nuestra opinión, esta política y esta conducta del PSOE y sus aliados de IU, son una total ingerencia en los asuntos internos de Cuba para apoyar y justificar la opresión, para ofrecer una imagen de cambio a partir de gestos pactados en las que se manipulan personas y se abusa de la desinformación y la falta de libertad de expresión que sufren los cubanos. Así están dañando las relaciones entre los pueblos de España y Cuba y protagonizando una deslealtad al vínculo cultural, humano e histórico que existe entre nuestros pueblos.

Cuando amigos del PP o de Unió Democrática de Cataluña dicen que si vienen a Cuba van a encontrarse con nosotros y el gobierno cubano les niega esa posibilidad, y entonces ellos no vienen, se niegan entonces a ser parte de la exclusión que sufren los cubanos.

Cuando el PP dice que quiere mantener el diálogo con los cubanos, pero con todos los cubanos y no se deja imponer condiciones de exclusión y proclama con transparencia que trabajará por el respeto a los derechos de todos los cubanos, esta tendiendo la mano hermana del pueblo español al pueblo cubano.

The PSOE’s manipulation is not a friendly Spanish hand .By Oswaldo Payá

March 3rd, 2008 We have never intervened in Spanish domestic politics, although recently the PSOE [Spanish Socialist Labor Party] has used Cuba , our pain, and the disadvantage of our people because of the oppression under which we live, for political ends. It does so in the first place by offending the intelligence of Cubans and Spaniards, covering the sun with their thumb and justifying that which has no justification. Their stated ends with that so-called critical dialogue have become a means for partisan politics, instrumentalizing in a generally crude way the Cuban situation. Exhibiting like a trophy what they call achievements—for their political gain—is not faithful to Cubans, nor Spaniards, as the PSOE government and its ally, the IU, know full well that there has not been any compromise nor demonstrated will for positive changes for Cuba . And the changes, if they are real, must entail freeing all political prisoners, not exiling and “giving away” some of them before the Spanish elections. But the policy of the PSOE and the IU demonstrates clearly to the Cuban government that it is not an important issue, that relations can develop fully even with the continuity of the status quo without rights, but that “gestures” are needed to present something to Spaniards before they vote. I do not know who should feel more insulted: the Spanish or the Cubans.  Mr. Bernardino León has mentioned me by saying that “even Oswaldo Payá, who is of the same political family as the PP [Popular Party], supports the critical dialogue of the PSOE.”  First of all, we are part of Spain ’s family, but that seems to be something the PSOE cannot comprehend because of the sectarianism that has invaded it. We will always respect the government elected by the Spanish as the government of Spain, but in the last four years, even on the international stage, this government has not been one to extend the Spanish hand to Cuba, but in fact manipulates—or allows the manipulation of—Cuba by the Socialist and Communist parties. We respect many people of good will within that party and their voters, but they must know how we feel, what is done in their name, and worse, what is done in the name of Spain . If this is also happening within Spain , if sectarianism has allowed the state and society to be captured by a party, that is something its citizens need to resolve. We ourselves suffer greatly from this sectarianism and know full well what it means.  Another point is that the so-called “critical dialogue” is neither a dialogue nor is it critical. Our experience is that during previous governments, and especially during the preceding one, there was a true critical dialogue with the Cuban government and a real dialogue on the issues we wanted to discuss. Truly, the relationship established between Cuban civil society and the previous government was a relationship with the government of Spain and not with “the government of the PP.”  And it was a fluid relationship: very dignified, transparent, positive and respectful. The government of the PSOE—the government of a party—began with this government that exists in Spain today and never before, since the transition.  Excluding us from the invitations to the national celebrations was a very symbolic first step to the exclusion that would come later. By denying us these symbolic gestures that recognize that in Cuba there is not only a government but also a civil society, this government of the PSOE and its ally the IU has been coherent from the beginning, and since has attempted to have all of Europe adopt the same policy. That is to say, distancing itself from civil society, justifying the regime, and worst of all, presenting the supposed progress as achievements while the oppression and lack of rights is maintained or grows. In this way they have not contributed but have in fact damaged peaceful change in Cuba , as they encourage immobility. It is an insult that a policy highly criticized by almost all representatives of most civil society and dissident groups in Cuba be presented as the triumph of a party. If they want our opinion, this policy and conduct of the PSOE and its IU allies are a complete interference in the internal affairs of Cuba to support and justify oppression, to offer an image of change based on coordinated gestures in which people are manipulated and Cubans’ lack of information and freedom is abused. They are damaging the relationships between the people of Spain and Cuba and promoting disloyalty to the cultural, human and historic links that exist between our people.   When friends of the PP or the Democratic Union of Cataluña say that they want to meet with us if they come to Cuba , and the Cuban government denies them that opportunity and they consequently do not come, they refuse to take part in the exclusion that Cubans suffer. When the PP says that it wants to maintain a dialogue with Cubans, but with all Cubans, and it rejects conditions of exclusion and proclaims with transparency that it will work for the respect of the rights of all Cubans, it extends the friendly hand of the people of Spain to the people of Cuba . 

Esta web utiliza cookies propias para su correcto funcionamiento. Contiene enlaces a sitios web de terceros con políticas de privacidad ajenas que podrás aceptar o no cuando accedas a ellos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Ver Política de cookies
Privacidad