Oswaldo Payá presenta un programa de transición y llama al diálogo nacional en Cuba
El opositor cubano Oswaldo Payá, líder del Movimiento Cristiano Liberación (MCL), instó al diálogo nacional en Cuba en torno a un programa de transición que plantea, entre otras medidas, la redacción de una nueva Constitución. Según Payá, la iniciativa, la primera de estas características presentada en los últimos años en la isla, «es un instrumento en torno al cual puede realizarse el diálogo, con una visión de reconciliación y amnistía para todos».
L D (EFE) Payá presentó un detallado programa de transición que pretende someter a un debate abierto entre los ciudadanos, del que no excluye al gobierno de Fidel Castro ni a cubanos del exilio, con el fin de concretar una redacción definitiva y someterlo a un referéndum.
El documento, elaborado por «un equipo de ciudadanos cubanos que vivimos en la isla», pretende facilitar «que los cubanos diseñen su propia transición para después ser sometida a referéndum», explicó. «Se trata de no romper el orden institucional ni caer en la violencia, ni que tampoco sea confiscado este proceso por mafias y grupos de poder»,agregó.
Payá dijo pretender promover el diálogo a través de «comités ciudadanos» en todo el país, cuyas «sugerencias» se incluirían en el texto final de este «programa de transición», que se sometería a referéndum. En caso de aprobación, se convertiría en la base de un proceso de transición hasta que una Asamblea Constituyente, elegida democráticamente, elaborara una nueva Constitución que sería también sometida a referéndum. La propuesta, desarrollada en nueve capítulos, incluye medidas como una «amnistía política general» para los presos políticos y para «los condenados por estos motivos aún cuando se disfrace la verdadera causa con otras acusaciones».
Asimismo, reconoce el derecho a la propiedad privada de los cubanos y de los extranjeros afincados en la isla y plantea la desaparición del dólar como moneda de uso en Cuba. En materia económica, subraya, «el programa no se enfoca ni al capitalismo ni al socialismo, sino a la armonización de la práctica de los derechos humanos y la justicia social con la libertad económica y el desarrollo sostenible». La iniciativa presta especial atención a los cubanos del exilio que, según la propuesta de Payá, no recuperarán las propiedades que les fueron confiscadas durante la revolución ni serán indemnizados durante la etapa de transición.
Sin embargo, concede a los exiliados cubanos «prioridad» sobre los extranjeros para realizar inversiones en Cuba y propone la creación de una «Comisión de Reencuentro Nacional», para coordinar «el deseado encuentro del exilio con los cubanos que vivimos en Cuba». Payá propone también la «desmilitarización» de la sociedad, con el «cese como instituciones» de la Fuerzas Armadas y del Ministerio del Interior, que quedarían bajo la autoridad de un poder civil. Además, la propuesta incluye la elaboración de un nuevo Código Penal, programas de Asistencia a Necesitados y de Educación, leyes que garanticen la libertad de expresión y asociación y una nueva ley electoral.
En materia de relaciones exteriores, el «programa de transición» presentado por Payá apuesta por un «diálogo» con Estados Unidos «sobre la base de nuestra independencia y soberanía», que permita superar «las tensiones y diferencias actuales, sobre bases justas y respetuosas». También apuesta por el diálogo con lo antiguos países socialistas, por la integración con los vecinos de América Latina y por «nuevos lazos de relación» con la Unión Europea.
El líder del MCL explicó que esta iniciativa «no sustituye, sino que complementa» al Proyecto Varela, una propuesta de reformas constitucionales de apertura que respaldó con la presentación de más de 25.000 firmas ante el Parlamento cubano, entregadas en mayo de 2002 y en octubre pasado. En opinión de Payá, lo más importante es que los cubanos participen en un proceso de diálogo nacional sobre la base de la reconciliación para lograr un cambio pacífico en la isla.