(Fran Ruiz en Madrid ) ( 2004-05-05 ) Crónica México
Carlos Payá, hermano menor del líder de la disidencia cubana Oswaldo Payá, declaró en entrevista a La Crónica desde Madrid, que el gobierno mexicano ha actuado con la firmeza que se debe esperar de un país democrático frente a la injerencia de regímenes dictatoriales como el cubano, y dijo que este ejemplo debería ser seguido por los países de la Unión Europea (UE), a los que Fidel Castro acusó en su discurso del 1 de Mayo de mafia al servicio de Estados Unidos.
«Ningún país soberano debe consentir la acumulación de agravios como los vertidos por Castro contra el gobierno de Vicente Fox, por eso considero muy firme la decisión adoptada por las autoridades mexicanas de llamar a consultas a su embajador en La Habana», declaró Payá, quien dirige desde la capital española el Movimiento Cristiano Liberación, organización disidente presidida por Oswaldo Payá que busca la recuperación de las libertades democráticas en Cuba mediante el diálogo nacional.
Según Carlos Payá, la «pataleta de Castro» contra México, Perú, Chile y los 15 países de la Unión Europea (UE) por votar contra el régimen cubano en la Comisión de Derechos Humanos de la ONU, el pasado 19 de abril, «ha sido contestada con dignidad» por varias naciones latinoamericanas, con México a la cabeza, y así debería ser permanentemente, «porque está en juego la defensa de los derechos humanos del pueblo cubano y su libertad. No hay que olvidar que el voto de México en Ginebra no fue contra Cuba, sino en contra de su gobierno y a favor del pueblo cubano».
En cuanto a la reacción europea frente a esta crisis y frente a las declaraciones de Castro, quien declaró que «la UE vota contra Cuba en bloque, como mafia aliada y subordinada a Washington», el disidente cubano dijo desconocer si se adoptará algún tipo de medidas de represalias.
«Lo importante, más que el hecho concreto de si los países europeos llamarán o no a sus respectivos embajadores, es el trasfondo de la cuestión; es saber que no se puede insultar a países soberanos y esperar que no pase nada», declaró. Carlos Payá espera que cuando se apruebe la nueva Constitución Europea se refuerce uno de sus puntos débiles, como es su política exterior, y los 25 países miembros (el domingo se produjo la adhesión de 10 nuevos socios) hablen con una sola voz contra un régimen, el de Fidel Castro, que viola los más elementales derechos humanos.
Posición de Zapatero.
El cambio de gobierno en España y la salida del poder de José María Aznar, «un gran amigo del pueblo cubano», como dijo Carlos Payá, es seguida con mucha atención por los cubanos residentes en España, que esperan que el nuevo mandatario, el socialista José Luis Rodríguez Zapatero no rompa las relaciones «intensas y fluidas» que mantenía el anterior gobierno con la disidencia.
«En las últimas declaraciones de Zapatero sobre Cuba, el ahora presidente insistió en la prioridad de buscar una solución democrática para la isla, lo que necesariamente pasa por el diálogo con la disidencia y la presión contra el régimen de Castro», señaló Payá.
El responsable de Relaciones con Iberoamérica del diario madrileño La Razón, Humberto Montero, dijo al respecto que espera que Zapatero mantenga la misma firmeza que con Aznar y que la UE dé una señal «clara e inequívoca» de que está contra el régimen de Castro y de que no va a tolerar injerencias ni insultos.
El gobierno español no ha emitido hasta la fecha ninguna declaración sobre la crisis entre México y Cuba ni sobre las polémicas declaraciones de Castro. Las únicas declaraciones sobre la situación cubana las pronunció hoy martes el Defensor del Pueblo Español, Enrique Mugica, quien presidió en la Casa de América la entrega del Premio Internacional de Derechos Humanos que concede la Fundación Hispano Cubana. Durante su intervención dijo que el «largo lagarto verde anclado en el Caribe es hoy símbolo de opresión y tiranía».