PROCESO Oswaldo Payá: perfil de un disidente cubano (Segunda parte)

PROCESO Oswaldo Payá: perfil de un disidente cubano (Tercera parte)

PROCESO Oswaldo Payá: perfil de un disidente cubano  (Segunda parte )

“Actos de repudio”

En 1980 –durante el éxodo de El Mariel– unos familiares vinieron a buscar a la familia de Payá para emigrar a Estados Unidos Todos sus miembros se negaron a abandonar el país No obstante, el hecho provocó nuevos actos de repudio en contra de su familia

En los años 80, Payá ingresó a trabajar en el sector de Salud Pública, como especialista en equipos electrodomésticos Los agentes de la seguridad del Estado no dejaron de vigilarlo y de hacerle visitas a su centro de trabajo En una ocasión lo detuvieron cuando iba a un hospital a reparar un equipo médico A veces, los agentes de Seguridad del Estado lo “acompañan” cuando Payá se dirige en bicicleta al trabajo o a la iglesia Durante períodos se sitúan frente a su casa y le piden identificación a las personas que lo visitan

En 1986 Payá participó al Encuentro Nacional Eclesial Cubano (ENEC) como miembro de la diócesis de La Habana Presentó allí un trabajo titulado Fe y Justicia, donde defiende el derecho de los católicos cubanos a practicar su fe con libertad y hace un llamado a la Iglesia Cubana para que defienda los derechos de los cubanos y denuncie las injusticias

En 1987 organizó, junto con un grupo de laicos, la Peña del Pensamiento Cubano, en la Parroquia del barrio Cerro Allí editó lo que sería la primera publicación católica autónoma e independiente, Pueblo de Dios, donde defendía las libertades de los creyentes Dicha publicación fue posteriormente prohibida Entonces, Payá fundó el Movimiento Cristiano Liberación (MCL)

Su objetivo: la lucha pacífica para lograr la reconciliación nacional y los cambios en Cuba de manera gradual y pacífica En 1990 fue encarcelado e interrogado durante varios días Payá decidió entonces hacer un llamado al diálogo nacional y comenzó la campaña para recoger las firmas del Proyecto Varela

Dicho Proyecto –por el cual Payá recibió en octubre pasado el Premio Sajarov de Derechos Humanos que concede el Parlamento Europeo– promueve un referendum sobre cinco puntos: derecho a la libre asociación, derecho a la libertad de expresión y de prensa, amnistía para los presos políticos que no hayan atentado contra la vida, derecho a los cubanos a tener sus propias empresas privadas y una nueva ley electoralEl proyecto fue presentado a la Asamblea Nacional del Poder Popular (Parlamento) en mayo del 2002, luego de recibir el apoyo de más de 10 mil firmas, requisito que marca la propia Constitución Sin embargo, el Asamblea Nacional aprobó en mayo de 2002 una modificación constitucional en la que declaró al socialismo como “irrevocable”, luego de una consulta en la que se recogieron firmas por todo el país y en la cual, según datos del gobierno, votaron a favor unos nueve millones de cubanos Fue, en los hechos, una respuesta para bloquear el Proyecto Varela

El 11 de junio de 1991 Payá sufrió un nuevo “acto de repudio”: su vivienda fue asaltada y saqueada En sus fachadas los partidarios del régimen pintaron frases que decían: “Payá, agente de la CIA”, “Gusano”, “Viva Fidel” Payá no se inmutó en borrar las frases, que cubrieron la fachada de su casa durante ocho años Y lo mismo ocurrió en noviembre pasado, cuando se preparaba para salir rumbo a Europa para recibir el premio Sajarov

PROCESO Oswaldo Payá: perfil de un disidente cubano  (Tercera parte)

“El derecho a los derechos”

En 1992, Payá hizo pública, por primera vez, su intención de postularse para diputado a la Asamblea Nacional del Poder Popular Dos días antes, agentes de la seguridad cubana lo detuvieron, trasladándolo a la sede de un Comité de Defensa de la Revolución (CDR) Lo retuvieron allí hasta que terminó el proceso de postulación Lo amenazaron: si se postulaba “correrría la sangre”

Durante estos últimos años, Payá ha recibido innumerables invitaciones para asistir a conferencias, encuentros y eventos relacionados con los Derechos Humanos en otros países, entre ellos España, Letonia, Venezuela, Chile, México y otros países europeos, a los cuales se les ha prohibido asistir Estas prohibiciones han alcanzado también a su esposa, Ofelia Acevedo Maura, quien no pudo viajar a España invitada a un curso en la Universidad de Valencia Además, a sus hermanos, exiliados en Estados Unidos y España se les negó el permiso para viajar a la isla en agosto de 2000, cuando la madre de Payá agonizaba, enferma de cáncer

En 1995 Payá pidió a Washington levantar el embargo y revisar su política hacia Cuba Ese mismo año participó en la organización de Concilio Cubano, un foro aglutinador de la disidencia interna La reunión –que coincidió con la llamada “crisis de las avionetas”—fue prohibida por las autoridades de la isla

En 1992, Payá y otros miembros del Movimiento Cristiano Liberación, recogieron firmas de ciudadanos que los apoyaban como candidatos no gubernamentales a la Asamblea Nacional Fue un hecho sin precedentes si se considera que durante los 44 de gobierno de Fidel Castro los diputados son postulados por el Partido Comunista y sólo hay un candidato para cada curul Las comisiones electorales no aceptan las candidaturas de los disidentes

Ese mismo año Payá se pronunció en contra de la ley electoral La declaró “anticonstitucional” y “antisoberana” Luego redactó el “Programa Transitorio”, una propuesta para transformar la sociedad cubana de manera pacífica

Durante 1996 y 1997 redactó el Proyecto Varela Se dio a la tarea, junto con otros disidentes, de recoger las firmas de apoyo al mismo Las firmas fueron entregadas en una caja de cartón, el 10 de Mayo de 2002, en la sede de la Asamblea Nacional del Poder Popular en La Habana En total, se recaudaron 11 mil 20 firmas, junto a las cuales se anotaron el nombre y la dirección de los firmantes
Este proyecto ha obtenido un notorio respaldo internacional Prueba de ello fue su postulación el año pasado como candidato al Premio Nóbel de la Paz, así como el citado Premio Sajarov del Parlamento Europeo y el premio Averell Arriman, otorgado por el Instituto Nacional Demócrata de Estados Unidos, en reconocimiento por su labor pacífica en favor de los derechos humanos

Luego de gestiones del presidente español José María Aznar, en diciembre pasado el gobierno cubano autorizó a Payá a viajar a Estrasburgo, Francia, para recoger el Premio Sajarov Luego de entrevistarse con el presidente Aznar, viajó a Francia, donde fue recibido por el presidente de ese país Jacques Chirac Después viajó a Estados Unidos El lunes 6 de enero se entrevistó con el secretario de Estado Collin Powell Una semana después sostuvo un encuentro en Miami con algunos sectores del exilio, con quienes platicó sobre el Proyecto Varela y la necesidad de defender “los derechos de los cubanos a tener derechos”, por encima de diferencias políticas y divergencias sobre los métodos para lograr el cambio en Cuba

Esta web utiliza cookies propias para su correcto funcionamiento. Contiene enlaces a sitios web de terceros con políticas de privacidad ajenas que podrás aceptar o no cuando accedas a ellos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Ver Política de cookies
Privacidad